sábado, 22 de diciembre de 2012

"AÑO CERO, DÍA UNO"



“año cero, día uno”

Sonó el despertador como cada día, aun a oscuras extendí mi mano y lo apague, como cada puñetero día me levante y me puse las zapatillas, salí de la habitación y recorrí el pasillo hasta la cocina, puse la cafetera y la radio, me extraño que no sintonizase ningún canal, me tome el café, una ducha rápida y como todos los días salir apurado para el trabajo,
En el coche tampoco conseguía sintonizar ninguna emisora de radio, así que puse un compact.
Los sábados a primera hora casi no había tráfico, pero aun así llevaba diez minutos sin ver ni un solo vehículo circulando, tampoco ningún joven que regresase de fiesta, y aun menos algún madrugador que saliese a pasear al perro.
Mi preocupación iba en aumento, apague la radio, el silencio que existía solo interrumpido por el motor del vehículo comenzó a asustarme, decidí cambiar el recorrido y pasar por la zona de copas para echar una visual, los siguientes cinco minutos se me hicieron eternos, parados en el semáforo solo a una calle de los locales de copas, seguía sin ver a nadie, estaba a punto de estallar, abrió el semáforo y pise el acelerador a fondo, al entrar en la calle no vi a nadie, los locales estaban abiertos, pero no se veía movimiento, pare en medio de la calle, y comencé a recorrer los locales uno por uno, en algunos sonaba la música en otros era silencio, pero todos estaban vacíos. En mi desesperación comencé a recorrer la ciudad calle por calle, sin ver a nadie en ningún momento, ya no importaban los semáforos, ni las señales de stop. Pase horas y horas recorriendo la ciudad sin encontrarme una sola alma, ya no me quedaban lágrimas.
Estaba parado frente a un cartel luminoso, en el cual se podía leer 22 de Diciembre del 2012, 18:11 14º “BIENVENIDO AL FIN DEL MUNDO”

César Gorín
22 de diciembre de 2012